Que adolece de amor el amor
Sumario
FICHA DE LA OBRA
Observación General
Índice de autoridades:
- Que adolece de amor el amor,
- Música de varios autores escogida por el maestro Gerónimo Vermell,
- Cancionero Cortesano,
- Cancioneros del siglo XVII,
- Música española,
- siglo XVII,
Autor de la música
Anónimo
Voces:
4
Cancioneros:
Data:
Finales siglo XVII
Referencias:
- Música de varios autores escogida por el maestro Gerónimo Vermell [Manuscrito]. Borja, 1690. Disponible en la Biblioteca de Cataluña, signatura M 927; pp. 75v-76r.
- LAMBEA, Mariano , JOSA, Lola y VALDIVIA, Francisco, A. Nuevo Íncipit de Poesía Española Musicada (NIPEM), 2011. Disponible en: Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes Nuevo íncipit...
- JOSA, Lola y LAMBEA, Mariano. “Música de varios autores escogida por el maestro Gerónimo Vermell (1690). Breve descripción y detalle del contenido del M. 927 de la Biblioteca de Catalunya (Barcelona)”. Aula poética, 2010. En línea Música...
- Durón, Sebastián. Obras sacras en romance vol. 2. Serie partituras. Santo Domingo de la Calzada : Fundación Gustavo Bueno, 2015.
Observación
"Villancico al Samo a 4"
En la obra de Durón (2015) Figura este villancico bajo el título "Ay que adolece de amor", y de él se extrae el texto
TEXTO
ESTRIBILLO
Ay, que adolece de amor el amor,
y en tan divino accidente,
[si] fuego le yela,
le abrasa la nieve,
Padezca, sufra,
sienta, pene,
pues así se lo quiso
y así se lo quiere.
COPLA SOLO 1º
1ª Padezca el amor divino
de achaque de unos desdenes,
siendo el manjar de un jardín
la causa de su accidente,
y pues se apasiona
por lo que le ofende,
RE[SPUESTA] A 4
Padezca, sufra
siente, pene
pues así se lo quiso
y así se lo quiere.
2º COPLA SOLO
Sufre su piedad amante
la ingratitud de tal suerte,
que de león en cordero
su tolerancia le vuelve,
y pues quien le adora
la sangre bebe,
RE[SPUE]STA A 4
Padezca, sufra
siente, pene
pues así se lo quiso
y así se lo quiere.
2. No al común fatal letargo
rinda mi vida su esfuerzo,
porque si es sueño la muerte,
también es la vida suelo.
3. Duerma y descanse el que vive
de ocio vil a los imperios,
porque quien ama no sepa
al alivio del sosiego.
4. Tus [se]dientas tiranías
no han de rendir lo supremo
de un afecto que en la pena
tiene su mayor contento.
5. Alerta, alerta, alma mías,
vela aquel cándido velo
que solamente en finezas
late en continuos incendios.
6. No durmáis, ojos amantes,
siempre os halle amor despierto,
velad puesto que ignoráis
cuando vendrá vuestro dueño.